Además, cuenta como parte de las 5 frutas y verduras al día que recomiendan los organismos sanitarios
A 8 de cada 10 padres (86%) en España les preocupa que sus hijos no estén tomando las vitaminas y minerales que necesitan en su dieta diaria. Casi el 40% dice desconocer qué tipo de comida y bebida toman sus hijos en el colegio, y el 37% manifiesta que el aumento del coste de la vida ha hecho que resulte demasiado caro darles una alimentación que incluya las suficientes frutas y verduras.
El estudio, realizado por la consultora Savanta ComRes, revela también una falta de conocimiento por parte de los padres sobre cuál es la cantidad de fruta y verdura que sus hijos deberían consumir a diario para alcanzar los niveles de vitaminas, minerales y oligoelementos aconsejados por las autoridades sanitarias.
Desconocen, por ejemplo, que el consumo de zumo de fruta 100% es una manera asequible y saludable de que sus hijos cumplan estos requerimientos.
¿Qué hay en 150 ml de zumo 100% de naranja?
Y es que un vaso de 150 ml de zumo 100% de naranja aporta más del 90% de la ingesta diaria recomendada de vitamina C, y es una fuente importante de otros nutrientes vitales. Así lo ha mostrado un reciente estudio científico, publicado en la revista científica Nutrition Research Reviews, que señala que tomar dos o tres vasos de zumo de naranja 100% a la semana sería suficiente para alcanzar los requerimientos nutricionales de esta vitamina, tanto en niños como en adultos.
De toda la vitamina C que se toma en Europa, cerca del 26% proviene del zumo de naranja 100%.
Así como la mayoría de los encuestados reconoce que el de naranja y otros zumos de frutas son fuentes de vitamina, la encuesta revela que desconocen otros beneficios para la salud del consumo de zumo de fruta 100% natural.
Por ejemplo, 9 de cada 10 padres no saben que el zumo 100% de naranja aporta una buena parte de los requerimientos diarios de folato, que ayuda a reducir el cansancio y la fatiga, y de potasio, que contribuye al correcto funcionamiento del sistema musculo esquelético, permitiendo a los niños sentirse fuertes y activos.