El amor no tiene precio… pero las malas decisiones financieras, sí. Te contamos cómo evitar tropiezos y disfrutar de tu relación al máximo.
La relación perfecta no existe, pero los errores financieros sí. Y lo sentimos pero es momento de aceptar que hablar de dinero con tu pareja es necesario para poder crear un futuro sólido juntos. Así que si quieres saltarte esos tropiezos financieros y mantener tu estabilidad en pareja, aquí te contamos los errores más comunes y cómo superar esos retos.
1. Evitar hablar de dinero en pareja
“Amor, lo importante son los sentimientos”… sí, pero también es importante saber si esos sentimientos vienen con deudas, ahorros o una lista de gastos “sorpresa”. Evitar hablar de dinero solo retrasa lo inevitable y tarde o temprano tendrán que sentarse a discutir el tema.
Para empezar, organicen cómo tendrán “la charla financiera”. Tampoco se presionen tanto por eso, pueden hacerlo de forma relajada, como en una cita en casa con café y snacks. Hablen sobre sus ingresos, deudas, metas financieras y cómo quieren manejar sus gastos conjuntos.
2. Asumir que ambos tienen los mismos hábitos de gasto
“Pensé que sabías ahorrar” o “no sabía que gastabas tanto en café”… Las suposiciones son un boleto directo a las confusiones financieras. Cada persona tiene una forma distinta de manejar el dinero, y es importante entender cómo funciona cada quien.
Así que pregúntense mutuamente: “¿Qué significa el dinero para ti?”. Puede sonar profundo, pero es clave para entender sus prioridades y evitar malentendidos. Si uno es ahorrador y el otro es más gastador, busquen un balance que funcione para ambos.
3. No contar con un fondo de emergencias conjunto
Las emergencias llegan sin invitación, y si no están preparados, pueden desbalancear las finanzas en pareja. Desde una reparación inesperada hasta gastos médicos, tener un fondo de emergencias es clave para evitar tensiones futuras y de esta forma también se aseguran de estar protegidos y tranquilos ante cualquier situación.
Para lograr esa calma, establezcan un fondo de emergencias conjunto. Definan cuánto quieren ahorrar y aporten una cantidad mensual.
4. Dividir los gastos de manera desigual
Uno paga todo y el otro “solo lo que puede”… esto puede generar malentendidos a largo plazo. Si los gastos no están bien repartidos, uno de los dos puede sentirse más presionado y obvio no es la idea.
¿Cómo evitarlo? Comiencen por dividir los gastos según sus ingresos. Por ejemplo, si uno gana más, puede aportar un porcentaje mayor. Lo importante es que ambos se sientan cómodos y que no haya desequilibrios.
Extra tip: Paguen sus servicios desde una sola cuenta usando DiDi Pay, así pueden llevar un mejor control de los pagos y aprovechar las bonificaciones para darse sus gustitos después.
5. No definir metas financieras compartidas
“Yo quiero viajar y tú quieres ahorrar para una casa”. Tener prioridades distintas puede ser un problema si no se alinean como equipo.
Así que para que esto no les ocurra, definan metas financieras. Hablen de sus sueños a corto, mediano y largo plazo. Pueden tener metas individuales, pero también es importante trabajar en algo juntos, como un fondo para vacaciones o un ahorro para el futuro.
6. Endeudarse para impresionar a la pareja
“Te compré este regalo”… ¿pero a qué costo? No necesitas endeudarte para demostrar tu amor. Las finanzas responsables también son una muestra de cuidado y compromiso.
Ponte límites financieros. Los detalles cuentan, pero no es necesario vaciar tu cuenta bancaria. Además, puedes aprovechar las Gift Cards de DiDi Pay para dar un regalo significativo sin gastar de más.
7. No usar herramientas para gestionar el dinero
Todavía hay parejas que hacen cuentas en una libreta o que olvidan sus fechas de pago. Ustedes no sean así y aprovechen las herramientas digitales para facilitar su gestión financiera.
¿Cómo? Fácil, usen aplicaciones como DiDi Pay para llevar el control de sus finanzas. Desde pagar servicios hasta recargar saldo o comprar Gift Cards, tener todo en una sola app facilita las cosas y ayuda a evitar retrasos u olvidos.
Llevar las finanzas en pareja no tiene que ser un pretexto para acabar en conflicto. Con comunicación, organización y las herramientas adecuadas, pueden disfrutar de una relación sana sentimentalmente y económicamente.
